Una gran caravana de migrantes hondureños que penetró en Guatemala la semana pasada se disolvió el martes ante el bloqueo de las autoridades guatemaltecas. Pequeños grupos siguieron adelante hacia la frontera con México, mientras otros aceptaron el transporte de las autoridades de regreso a su país.
Su situación era desesperante en Honduras, donde los estragos del COVID-19 y dos poderosos huracanes en noviembre se sumaron a la pobreza crónica y la violencia de las pandillas. Estos factores combinados con las esperanzas que despierta el nuevo gobierno del presidente electo Joe Biden dieron lugar a la primera caravana de migrantes del año.
Pero el martes, autobuses con decenas de migrantes y patrullas policiales con pequeños grupos arribaron esporádicamente durante la mañana al cruce de El Florido en la frontera con Honduras. Los agentes fronterizos guatemaltecos los entregaron a sus contrapartes hondureños y luego abordaron autobuses de regreso a sus pueblos de origen.
En Guatemala, a unos 40 kilómetros de la frontera, donde cientos de migrantes estuvieron detenidos por un retén en Vado Hondo, el tráfico volvía a fluir y quedaban pocos migrantes. Las autoridades guatemaltecas dijeron que hasta el lunes más de 2.300 migrantes habían regresado a Honduras.
Si el gobierno guatemalteco realmente logró disolver la primera caravana del año, esto sería un alivio para el gobierno entrante. Biden ha prometido reformar las leyes de inmigración, pero por ahora piensa dejar vigentes las normas de la era Trump antes que permitir una gran ola de inmigración apenas asuma el cargo.
El gobierno de Guatemala había prometido que detendría la caravana por razones de inmigración y salud incluso antes de que se formara en la localidad hondureña de San Pedro Sula la semana pasada. El presidente Alejandro Giammattei dijo que 2.000 efectivos militares y policiales irían a la frontera.
Estas fuerzas no detuvieron la caravana en la frontera sino en una serie de retenes ubicados estratégicamente donde disolvieron a la multitud con gases y a bastonazos.
El subsecretario en funciones de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Oeste del Departamento de Estado estadounidense, Michael Kozak, felicitó el martes a Guatemala a través de Twitter por “cumplir sus responsabilidades al responder apropiada & legalmente a la caravana migrante reciente”.
Los migrantes centroamericanos empezaron a recurrir a las caravanas en 2018 como alternativa de bajo costo a contratar a un contrabandista. La multitud da fuerzas e inicialmente las caravanas lograron atravesar Guatemala y México. Pero Washington ha encabezado esfuerzos para coordinar una respuesta más agresiva de los países involucrados e impedir que avancen.
Las caravanas representan una fracción del flujo total de migrantes que pasan sin ser detectados.