Luego de que un juez a mediados de julio diera el paso para la demolición de la iglesia en Sutherland Springs, donde un hombre armado mató a más de dos docenas de fieles en 2017, este lunes comenzó la demolición del santuario.
Tras el tiroteo en la Primera Iglesia Bautista de Sutherland Springs, la iglesia convirtió el santuario donde tuvo lugar el ataque en un monumento conmemorativo. Luego, los miembros de First Baptist votaron en 2021 para derribar el edificio.
Aproximadamente un año y medio después del tiroteo se completó una nueva iglesia para la congregación.
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Algunos de los que visitaron el monumento en julio después de que se difundiera la noticia de la inminente demolición dijeron que era un lugar que traía consuelo. Sin embargo, la iglesia dijo en un expediente judicial que la estructura era un “recordatorio constante y muy doloroso” y que los miembros de la iglesia votaron en 2021 para construir un monumento al aire libre allí.
Unas 26 personas murieron en el tiroteo el 5 de noviembre de 2017, entre ellas una mujer embarazada y su bebé por nacer.
El hombre que abrió fuego en la iglesia, Devin Patrick Kelley, murió de una herida de bala autoinfligida después de que fue perseguido por transeúntes y chocó su auto.
Los investigadores han dicho que el tiroteo parecía surgir de una disputa doméstica que involucraba a Kelley y su suegra, quien a veces asistía a los servicios en la iglesia, pero no estaba presente el día del tiroteo.
