El futuro de la vicepresidenta Kamala Harris dio un giro de 180 grados el domingo cuando el presidente Joe Biden ofreció el respaldo a su candidatura presidencial tras anunciar que dejaba la contienda.
Ahora, los ojos del país y del mundo están puestos en la abogada de 59 años que supo ser fiscal general en California, senadora federal y precandidata a la nominación demócrata, dándole batalla a quien es hoy su jefe.
La vicepresidenta se enfila como favorita para ser la candidata demócrata que enfrentará al expresidente Donald Trump en noviembre y para eso, deberá ser confirmada -votada- por los delegados en la Convención Demócrata en agosto en Chicago.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Antonio aquí.
Pero la pregunta que muchos votantes se hacen es ¿cuál es su postura en los temas candentes como el aborto y la inmigración?
HARRIS Y EL DERECHO AL ABORTO
Sobre el aborto, Harris ha mostrado durante su carrera política una férrea defensa al derecho de las mujeres de terminar con el embarazo y ha cuestionado de manera muy fuerte el fallo de la Corte Suprema que puso freno a Roe vs Wade, el precedente que protegía el derecho al aborto.
Tras el polémico fallo, Harris se convirtió en la voz de los derechos reproductivos desde su función en la Casa Blanca, embarcándose en giras por los estados difundiendo la importancia del derecho al aborto.
Como senadora, copatrocinó una legislación que prohibiría a los estados imponer restricciones al derecho al aborto y votó en contra de un proyecto de ley que prohibiría los abortos después de las 20 semanas de embarazo.
Muchos analistas coinciden en que Harris tiene una postura mucho más fuerte que Biden sobre el derecho al aborto y que su condición de mujer la ponen en un mejor plano con vistas a la conquista del apoyo de votantes en las elecciones de noviembre.
HARRIS Y EL TEMA MIGRATORIO
Sobre inmigración, vale aclarar que ella no maneja la política fronteriza y no es la zar de la frontera, como la catalogan Trump y su campaña.
Por el contrario, el presidente Joe Biden la nombró para que se encargara de abordar las causas que generan la migración en los países de América Central.
Y como tal, Harris expresó en el 2021 durante una reunión con el presidente de Guatemala, Alejandro Giammattei que “quiero dejar claro a la gente de esta región que está pensando en hacer ese peligroso viaje hasta la frontera entre Estados Unidos y México: no vengan. No vengas. Estados Unidos seguirá haciendo cumplir nuestras leyes y asegurando nuestra frontera”.
No obstante, el actual gobierno de Biden ha puesto en marcha medidas fronterizas que frenan el acceso al asilo en la frontera sur, tal como lo hacía el entonces presidente Trump, quien regresaba a sus países de origen a la mayoría de los migrantes.
Sobre la presencia de los más de 12 millones de indocumentados en suelo estadounidense, Harris -hija de inmigrantes de Jamaica e India- se ha mostrado a favor de una reforma migratoria que abra el camino a la residencia permanente.
Y les ha declarado su apoyo a los más de 700,000 beneficiarios del DACA (dreamers), el programa que protege de la deportación a quienes llegaron a EEUU de niños, traídos por sus padres.
Sus posturas contrastan fuertemente con las de Trump, quien categoriza a los inmigrantes como “delincuentes”, “violadores” y “asesinos”, mientras que ha anunciado que apenas asuma la presidencia, iniciará una deportación masiva de indocumentados.
GUERRA ENTRE ISRAEL Y HAMAS
Sobre la guerra entre Israel y Hamas, Kamala Harris se muestra un poco más abierta a criticar con más dureza al gobierno que encabeza Benjamin Netanyahu, para que frene los feroces ataques en Gaza que matan civiles palestinos, en su mayoría.
Hamas atacó en octubre del años pasado un festival al aire libre, dejando más de 1,200 asistentes muertos.
En respuesta, Israel comenzó a atacar la franja de Gaza, donde residen millones de palestinos, matamdo hasta el momento a más de 38,000, miles de ellos, mujeres y niños.
HARRIS Y LA COMUNIDAD LGBTQ+
En cuanto a la comunidad LGBTQ+, Kamala Harris es una férrea defensora de sus derechos.
En varias ocasiones, como vicepresidenta, ha hecho públicas sus declaraciones en contra de la medida “No digas gay”, que se puso en vigencia en el estado de Florida.
Y ha visitado varias veces el histórico bar Stonewall Inn en Nueva York, en apoyo de la lucha por los derechos de las personas gay en Estados Unidos.
Pero, como reporta la revista Time en su página web, Harris ha sido criticada porque durante su mandato como fiscal general en California, fue responsable de escritos legales que negaban el acceso a cirugías a reos transgénero que las reclamaban.
DERECHO A LAS ARMAS
Sobre el polémico tema del acceso a las armas, Kamala Harris ha liderado un grupo de trabajo para prevenir las muertes por el uso de las armas.
En marzo pasado, Harris visitó la escuela en Parkland, Florida, donde fueron masacrados 16 estudiantes y un profesor.
HARRIS Y LOS IMPUESTOS
Finalmente, y sobre los impuestos y las políticas impositivas, a Harris se le presupone una tendencia más progresista dentro de su partido, y en ese sentido se esperan de ella políticas más proclives a ayudar a las clases medias y trabajadoras, según reporta la agencia EFE.
A falta de declaraciones concretas, se recuerda su protagonismo al promover en 2020 la iniciativa LIFT, un crédito sobre los impuestos para las clases medias ($3,000 para los solteros, el doble para parejas).
La página Taxnotes.com destaca que Harris es "tan progresista como pragmática", y que ha promocionado reformas fiscales para aliviar las cargas sobre las clases bajas, negándose además a aplicar recortes para los más ricos, que la diferencia claramente de las promesas de Trump.
