Nuevamente aparecen productos alimentarios para niños en la mira de la FDA y estos vuelven a ser purés de frutas, esta vez de manzana con canela de las compañías Schnucks Markets, de Saint Louis, y Weis Markets, de Sunbury, en Pensilvania.
Estos productos que están siendo retirados del mercado podrían contener altos niveles de plomo, según la FDA, que ha recibido al menos 7 reportes de posible intoxicación con plomo, metal que en los niños puede producir dolor de cabeza, en el abdomen, cólicos, vómitos y anemia.
La semana pasada, también se habían retirado del mercado los purés de manzana de la marca Wanabana por contaminación con plomo.
El consumo de los productos contaminados puede provocar una “toxicidad aguda”, indicó la FDA.
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La doctora Dadilia Garcés, profesora de ciencias médicas del Miami Dade College, explica que "los síntomas y los daños a largo plazo no se detectan de una manera muy evidente. El riesgo en los niños es que el sistema neurológico se está formando aún y puede causar un daño que podría ser permanente, si se compara con los adultos".
Los expertos afirman que la intoxicación con plomo puede ser engañosa en el caso de los niños. El plomo es tóxico para personas de todas las edades, pero puede ser especialmente dañino para los niños. La mayoría de los menores no presentan síntomas evidentes, por lo que es importante que los menores expuestos se sometan a análisis para comprobar los niveles de plomo en la sangre
"Se puede confundir con cualquier otra enfermedad, y a largo plazo, puede presentarse dificultad para aprender, irritabilidad, problemas para concentrarse, y eso puede llevar, a inclusive que algunos niños sean diagnosticados con síndrome de hiperactividad y déficit de atención, cuando realmente lo que han tenido o tienen como es una intoxicación por plomo", asegura la doctora Dadilia Garcés, profesora de ciencias médicas del Miami Dade College.
La pasada semana, la FDA también había emitido una alerta similar de posible contaminación por plomo de compotas de la marca WanaBana, cuya compañía tiene sede en el sur de Florida.
Ante la pregunta de ¿qué hacer entonces si uno de los niños en casa ha consumido estos productos? La doctora Dadilia Garcés, profesora de ciencias médicas explica que "lo más importante es llevar el niño al pediatra de manera inmediata, quien va a realizar un examen de sangre para determinar qué nivel de plomo tiene el niño en ese momento en sangre. Si se encuentra por encima de 3,5 microgramos, que es el estándar que es establecido por el CDC, el pediatra considerará cuál es el tratamiento que debe recibir el niño, y si es necesario o no hospitalizarlo".