WASHINGTON — El presidente estadounidense Donald Trump, quien está infectado con el nuevo coronavirus y pasará varios días en el hospital militar Walter Reed para tratamiento y evaluación.
Sigue trabajando desde una oficina preparada para él en el hospital pero si fuera necesario, la 25ta Enmienda de la Constitución provee algunas respuestas sobre cómo puede ser transferido el poder presidencial, ya sea temporal o permanentemente.
Los planes para una enmienda que detallase una sucesión presidencial comenzaron tras el asesinato del presidente John F. Kennedy en 1963.
En 1965, el presidente Lyndon B. Johnson prometió en su discurso del Estado de la Unión que propondría “leyes para garantizar la necesaria continuidad de liderazgo si el presidente queda discapacitado o muere”. La enmienda fue aprobada por el Congreso ese año y ratificada en 1967.
Algunos presidentes han cedido temporalmente el poder, pero no todos invocaron la 25ta enmienda. Las transferencias previas de poder han sido generalmente breves y ocurrieron cuando el presidente se sometía a procedimiento médico.
Sucedió en el 2002, cuando el presidente George W. Bush fue el primero en usar la sección 3 de la enmienda para transferirle temporalmente el poder al vicepresidente Dick Cheney mientras Bush estaba bajo anestesia para una colonoscopía.
Bush transfirió de nuevo temporalmente el poder en el 2007 para otra colonoscopía.
La 25ta Enmienda no fue invocada luego que el presidente Ronald Reagan fue baleado en 1981, pero él transfirió temporalmente el poder al vicepresidente George H. W. Bush mientras se operaba para extirparse un pólipo del colon en 1985, pero dijo entonces que no invocaba formalmente la enmienda.
Aunque afirmó estar “consciente” de la misma, indicó que no pensaba que “los redactores de esta enmienda pretendieran que fuese aplicada en situaciones breves como esta”. Bush actuó como presidente durante ocho horas, de acuerdo con un libro sobre la enmienda escrito por John D. Feerick.
¿CÓMO FUNCIONA?
Para transferir temporalmente el poder al vicepresidente, un presidente envía una carta al presidente de la Cámara de Representantes y al presidente pro tempore del Senado, en la que afirme que “no puede ejecutar los poderes y deberes de su cargo”. El vicepresidente entonces se convierte en presidente en funciones.
Cuando el presidente está listo para reanudar sus funciones, envía otra carta. El proceso es detallado en la Sección 3 de la mencionada enmienda.
La Sección 4 explica qué sucede si el presidente se vuelve incapaz de ejecutar sus funciones, pero no transfiere el poder. En ese caso, el vicepresidente y la mayoría del gabinete pueden declarar no apto al presidente. Ellos entonces le envían una carta al presidente de la cámara baja y el presidente pro tempore del Senado diciéndolo. El vicepresidente entonces se convierte en presidente.
Si el presidente vuelve a estar apto para reanudar sus deberes, él puede enviar una carta explicándolo. Pero si el vicepresidente y la mayoría del gabinete están en desacuerdo pueden enviar una carta al Congreso en un plazo de cuatro días. El Congreso entonces tendría que votar. El presidente reanuda sus deberes a menos que dos terceras partes de ambas cámaras digan que no está listo. Esa sección nunca ha sido invocada.