SAN ANTONIO – El Concilio de San Antonio aprobó extender las órdenes de “quedarse en casa y trabajar seguros” hasta el 19 de mayo.
Con 10 votos a favor y uno en contra, las medidas requieren que los residentes del condado Bexar permanezcan en casa el mayor tiempo posible para continuar frenando los contagios de COVID-19 entre la comunidad.
Las medidas aprobadas este jueves no afectan la decisión del gobernador Greg Abbott de comenzar a reabrir la economía de Texas a partir de este viernes, pues los negocios permitidos podrán reiniciar sus operaciones con ciertas restricciones.
Todas las tiendas, restaurantes, cines, museos, bibliotecas, centros religiosos, campos de golf, y centros comerciales pueden reabrir a una capacidad del 25 por ciento a partir de este 1 de mayo.
Sin embargo, el alcalde Nirenberg y el juez Nelson Wolff, del condado Bexar, agregaron medidas adicionales para que tanto los empleados como los clientes puedan estar seguros.
Bajo el nuevo plan de confinamiento en casa, el uso de los tapabocas seguirá siendo obligatorio en lugares públicos, las personas deben continuar practicando el distanciamiento social, los desalojos quedan prohibidos al igual que las reuniones en grupo, y las personas mayores de 65 años deben evitar salir a la calle.