SAN ANTONIO - Los lagartos cornudos de Texas son muy escurridizos, pero a través de un análisis genético se puede saber información muy específica.
El biólogo Andy Gluesenkamp reveló que se hace fácil encontrar el excremento de estos animales y que lo usan como parte de una base de datos.
Un proceso genético realizado con las heces del lagarto permite saber qué tan lejos ha viajado y la edad que tiene, explicó el Zoológico de San Antonio en una nota informativa citando al biólogo.
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Los lagartos cornudos tienen cuerpos aplanados y patas cortas, por lo que a menudo se les confunde con los sapos.
En la parte posterior de la cabeza tiene dos espinas alargadas que parecen cuernos, de ahí su nombre.
El Zoológico de San Antonio indicó que recientemente liberó 50 de estos lagartos cornudos bebés para que regresen a su hábitat.
