SAN ANTONIO - En medio de la pandemia del COVID-19 a líderes locales les preocupa la situación dentro de la Cárcel del Condado Bexar.
El juez Nelson Wolff explicó que el número de reos sigue aumentando, al igual que el costo que esto representa para los contribuyentes. A esta fecha, en la cárcel se registran 129 casos del nuevo coronavirus, de los cuales 62 son guardias y empleados civiles.
Wolff indicó que de los 3, 700 reos que hay en la cárcel, 390 prisioneros están listos para ser transferidos al sistema penitenciario del estado.
Agregó que contribuyentes están pagando $50, 000 extras al día para mantener a los reclusos que están esperando ser transferidos a prisiones estatales.
De igual forma, Wolff estableció que esta preocupante situación no solo pone en peligro a los presos, pero también a las personas que trabajan en la cárcel. La falta de espacio hace cada vez más difícil separar a los reos.
Por último, el juez dijo que 600 reos aún continúan en la cárcel debido a la orden que emitió en marzo el gobernador Greg Abbott. Esta orden limita la habilidad de los jueces para liberar reos bajo fianza personal.