SAN ANTONIO, Texas - Una de las preguntas que siempre ha provocado un debate es si primero hubo un huevo o una gallina.
¿Pudo haber existido un huevo sin que lo pusiera una gallina? ¿Pudo haber existido una gallina sin que naciera de un huevo? Esa es la incógnita.
Los estudios sobre la historia de las especies revelan que el huevo viene de los reptiles, de acuerdo con una publicación del programa de Divulgación de Ciencia de la Universidad Autónoma de México (UNAM).
Aunque los huevos hacen pensar en las aves, el caso es que provienen de los reptiles primitivos.
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Las notas divulgadas por la UNAM revelan que el huevo surgió hace casi 300 millones de años y se considera como la transición final de los anfibios a los reptiles.
Es decir, así fue como los reptiles pudieron desarrollarse fuera del agua.
Por otro lado, las aves descienden de un grupo de dinosaurios pequeños conocidos como terópodos.
La conclusión sería que entre los huevos de los reptiles y el surgimiento de las aves hay miles de años de diferencia.
Ante este panorama, sepan entonces las gallinas que no le debemos a ellas los huevos, protagonistas de tantas recetas de cocina que disfrutamos.
Sabías que...
Hablando de los huevos, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural del Gobierno de México comparte las siguientes curiosidades:
- El cascarón del huevo actúa como barrera protectora de microorganismos. Puede ser rojo o blanco, dependiendo de la raza de la gallina.
- El proceso de formación de un huevo dura entre 24 y 26 horas.
- La yema de huevo contiene las vitaminas B6, B, B12, A, D, E y K. El 90 por ciento del calcio y el 93 por ciento del hierro que aporta un huevo, se encuentra en su yema.
