GUADALAJARA - José Luis Gallardo Parra, identificado como cómplice del narcotraficante Rafael Caro Quintero en el secuestro y asesinato de un agente de la DEA y su piloto, murió por causas naturales a los 75 años.
Según autoridades penitenciarias, Gallardo Parra conocido como "El Güero", murió en el Viejo Hospital Civil de la capital jalisciense a causa de una afección renal.
La justicia mexicana condenó a "El Güero" a 86 años de prisión por los asesinatos del agente de la DEA Enrique "Kiki" Camarena, y del piloto mexicano Alfredo Zavala Avelar ocurridos en 1985.
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email.> Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo San Antonio aquí.
Gallardo Parra fue detenido el 9 de enero de 1990 y permaneció preso en el Reclusorio de Puente Grande durante 32 años, pero por su afección renal fue trasladado al hospital donde murió.
Los restos mortales de "El Güero" Gallardo Parra serán entregados a sus familiares para que realicen los trámites funerarios.
"OPERACIÓN LEYENDA": LA RESPUESTA DE LA DEA POR EL ASESINATO DE "KIKI" CAMARENA
En febrero de 1985, el agente Camarena Salazar fue secuestrado, torturado y asesinado por integrantes del Cártel de Guadalajara y de la extinta extinta Dirección Federal de Seguridad (el aparato de inteligencia mexicano), según acusó la DEA.
Junto a "Kiki" Camarena estaba el piloto Zavala Avelar, a quien contrataba para lo llevara a sobrevolar zonas con influencia del narcotráfico.
De acuerdo con las investigaciones, el secuestro se produjo después de que líderes del desaparecido Cártel de Guadalajara descubrieron que había infiltrado esa organización.
Según investigaciones de la DEA, el agente fue torturado durante dos días antes de morir cuando aplastaron su cráneo.
El asesinato de este agente especial dio origen a la Operación Leyenda que llevó a la captura de los tres capos del Cártel de Guadalajara: Rafael Caro Quintero, Ernesto Fonseca y Miguel Ángel Félix Gallardo.
Ninguno fue extraditado a Estados Unidos; mientras Caro Quintero quedó en libertad y hoy el FBI ofrece una millonaria recompensa por su captura, "Don Neto" Fonseca cumple condena en su domicilio, y Félix Gallardo, "El Jefe de Jefes", permanece en prisión diezmado físicamente.
