HOUSTON – Este jueves se conocieron las nuevas cifras de solicitudes de desempleo a nivel nacional. 1.3 millones de personas requirieron ayuda del gobierno la semana pasada tras perder su trabajo.
Aunque la cifra ha ido disminuyendo poco a poco, en Texas se ha visto una tendencia en las últimas semanas en sentido contrario. Las solicitudes de ayuda por desempleo han aumentado un 30% desde mediados del mes de junio.
De acuerdo con las últimas cifras reveladas por la Agencia de Empleo de Texas (TWC por sus siglas en inglés), la semana que terminó en el 4 de julio se realizaron 117,244 solicitudes.
Esto es un poco más de un 30% frente a la semana que terminó el 20 de junio cuando el número de solicitudes llegó a 89,241, la más baja desde que explotó la pandemia desde finales del mes de marzo cuando se cerraron negocios no esenciales en el estado.
Cabe recordar que, para principios de abril, la cifra de solicitudes por desempleo en el estado llegó a 313,832, justo cuando la cifra de desempleo llegó al 14.4%, la tasa más alta en más de una década en el Estado.
La más reciente cifra de desempleo en Texas se ubicó en el 13% para el mes de mayo.
Pero la semana terminada el 27 de mayo, las solicitudes de desempleo ya habían subido a 96,141 y la semana pasada se llegó a las 117,244 solicitudes.
Esto implica que la tendencia alcista en cuanto al incremento de solicitud de ayuda al gobierno ya ha ocurrido durante las últimas dos semanas revirtiendo una tendencia que venía desde finales de abril.
Los condados Harris (17,081), Dallas (8,084), Tarrant (5,863), Bexar (5,340), Hidalgo (2,978), Travis (2,805), Fort Bend (2,214) y Collin (2,120) son los que registran mayores números de solicitudes de ayuda por desempleo.
Cabe destacar que hace un par de semanas el gobernador de Texas, Greg Abbott, reversó su decisión de reabrir la economía al ritmo que tenía planeado, luego de que se presentara un incremento considerable en el número de casos de infección y de la tasa positiva de contagio frente al número de pruebas realizadas.
Ante ello, se volvieron a cerrar bares y los restaurantes disminuyeron su capacidad de atención de un 75% a un 50%. Otros negocios de diversión también fueron clausurados temporalmente.
Esta semana Texas ha registrado números récord no solo en contagios, sino en hospitalizaciones y muertes.
